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En Chile, las comunidades luchan por reducir el impacto de la luz artificial durante la noche, ya que estudios científicos han demostrado que la luz azul perjudica a la vida silvestre y afecta el ritmo circadiano humano.
Los municipios y el gobierno están implementando normativas de iluminación que limitan la emisión de luz azul, especialmente en zonas de protección de la biodiversidad, para combatir la contaminación lumínica y el deslumbramiento, que comprometen la seguridad de conductores y peatones. El control de la luz azul es crucial debido a su dispersión y sus efectos en los ritmos circadianos de humanos, plantas y vida silvestre.
¿Te ha pasado que estás en medio de la oscuridad, enciendes una luz y al instante llegan muchos insectos?
Ahora, multiplica ese efecto por cada luminaria, farol o poste en las miles de ciudades de Chile y el mundo-
Este efecto, es uno de las tantas consecuencias de la contaminación lumínica, la cuál tiene múltiples impactos no solo en la vida de insectos y distintas especies, si no que también en la vida del ser humano.
Según el ministerio del medio ambiente, la contaminación lumínica corresponde a la alteración de la oscuridad natural de la noche, provocada por luz desaprovechada, innecesaria o inadecuada, generada por el alumbrado de exteriores.
Es decir,
Instalaciones lumínicas exteriores que pueden presentar irregularidades tanto en su instalación, como en el uso eficiente de la energía y/o sobreiluminación hacia el cielo.
La norma de emisión para la regulación de la contaminación lumínica, más conocida como Norma DS-43, es una ley promulgada el año 2012 que buscaba regular y evitar la emisión de flujo radiante o luz de cualquier tipo de lámpara o luminaria de exteriores hacia nuestros cielos.
Hoy, dado el aumento de la contaminación lumínica a nivel país, y las múltiples consecuencias que trae consigo este fenómeno para los diversos ecosistemas y la salud humana, se busca extender el uso de la norma para así regular el uso eficiente y sostenible de la luz e incorporar la biodiversidad como objeto de protección, lo que nos llevará de una iluminación eficiente a una iluminación sostenible.
En Aladdin estamos comprometidos con una iluminación eficiente, con altos grados de luminosidad e innovación. Es por esto que hemos desarrollado un FILTRO ÁMBAR que permite eliminar el contenido de luz azul, manteniendo un CRI y rendimiento lumínico aceptable y por sobretodo, en línea con una iluminación sostenible y consciente con el medio ambiente.
Contamos con una línea exclusiva certificada para la actual y nueva norma DS43.
Súmate al cambio e iluminemos juntos el futuro.